MAGDALENAS CON NARANJA Y CHOCOLATE

En algún lugar han escuchado mis súplicas y la temperatura ha descendido, regalándome una tarde de sábado nublada y con unos agradables 23º . No me apetece estar absolutamente en ningún sitio del mundo más que en casa, y pienso en qué puedo preparar para el desayuno. Abro la nevera: allí está, mirándome con cara de circunstancias, el tarro de mermelada de naranja casera que preparé hace un par de semanas. Me encanta la mermelada de naranja, pero como sólo la tomo yo, parece tener la cualidad de no terminarse nunca, ni de estropearse nunca. Es incorruptible, cual reliquia santa. Esto es lo que me da la idea: haré unas magdalenas de naranja y chocolate, que es una combinación de la que no me canso jamás. Me pongo a ello, pero hago el doble de la cantidad que os doy, porque mis dos hijos comen -en memorable expresión del pueblo de mi marido- más que un alcalde nuevo, y si no hago una cantidad respetable, empiezan las mutuas acusaciones de haber comido uno más que el otro, y los recuentos de unidades consumidas. No seré yo quien en esta ocasión dé lugar al conflicto. Un poco de paz, por favor...

Receta para 12 magdalenas:
3 huevos
120-150 gramos azúcar (yo pongo más bien poca, porque no me gustan los dulces muy dulces: lo mejor es probar la masa en crudo para hacerse una idea)
1 pellizco de sal
50 cc. leche
50 cc. aceite de oliva
1 naranja de zumo entera troceada. Que sea de zumo, con la piel fina. Si no, tendrá más cantidad de la fibra blanca que amarga.
1 cucharada de mermelada de naranja (opcional)
180 gramos de harina de repostería con levadura
50 gramos de chocolate cortado en trocitos o perlas de chocolate.
Precalentar el horno a 180º.
Batir los huevos con el azúcar a mano hasta que blanquee, o poner en la Thermomix 1 minuto, 50º, vel. 1, y luego otro minuto más sin temperatura. Añadir el pellizco de sal, la leche y el aceite, y mezclar. Añadir la naranja y la mermelada y batir hasta que quede fino, en la Thermomix es recomendable poner a la velocidad máxima dos o tres minutos, según la textura que queramos. Después añadimos el chocolate removiendo con una cuchara, nunca con la Thermomix, cuyas cuchillas hacen desaparecer todo. Llenamos los moldes dos terceras partes de su capacidad, ponemos unos pellizcos de azúcar sobre cada una y al horno unos 15 minutos. Sacar y dejar enfriar sobre una rejilla.
Consumir  -a ser posible- en un tranquilo y relajado desayuno de fin de semana O en una tranquila y relajada merienda. También en cualquier otro intervalo de tiempo de las mismas características. De ser preciso, enviad a los hijos adolescentes a otra habitación.  Proporciona más paz espiritual que la mejor relajación guiada.

Mi particular momento "ommmmm"